miércoles, diciembre 05, 2007

Divagaciones Sobre el Arte Contemporáneo: 2.-) Arte vs. Arte Contemporáneo.

 

Para poder hablar de arte contemporáneo, debemos primero tener clara el significado del arte en general;  dicho de otra forma,  debe procurarse primero una definición de "arte" que contenga todas las obras de arte hechas por el hombre;  desde las pinturas rupestres en Altamira,  hasta MTV;  desde los Zigurats y las Mastabas hasta el GUggenheim de Bilbao.

En mi opinión,  el arte se define como una expresión humana, producida y reproductora de una carga emocional, no por su naturaleza material,  sino por su significado metafísico. 

Como expresión humana,  el arte calza perfectamente en el molde lingüistico de " Emisor ----> (mensaje)-----> Receptor".  El arte se diferencia del resto de expresiones humanas por no sólo expresar lo que dice. La sensibilidad del artista le permite establecer un medio de comunicación paralelo al mensaje objetivo,  a través del cual  se genera un vínculo emocional (y espiritual para algunos) entre el medio (la obra de arte en sí) y el receptor. 

impresionismomonetsol

A través de la historia,  la evolución del arte nunca ha alterado este modelo lingüistico.  De tiempo en tiempo, el arte se ha renovado a través del tiempo, cuando los artístas y las élites culturales modificaban de común acuerdo el código que estructura el mensaje de la obra de arte.  Eso ha sido la causante de la aparición de los "estilos".  Y siempre ha sido así.  El arte se ha rejuvenecido siempre a causa de la aparición de los estilos;  y los estilos no son más que redefiniciones del lenguaje artístico,  entre los miembros de una comunidad.  Eso fue así ,  hasta el siglo XIX.

A mediados del siglo antepasado,  comienza una serie de cambios vertiginosos en la vida cotidiana de los ciudadanos occidentales.  Revolución Francesa,  revolución industrial,  efervescencia política;  todo ello condujo a un aceleramiento en la vida de las personas.  El arte,  como reflejo indirecto que es de la cultura que la produce,  no se quedó atrás.  Los cambios que antes se daban en medio siglo comenzaron a darse en la mitad de ese tiempo. Este incremento en la velocidad de los cambios logró que germinara en los artistas y en la élites culturales un nuevo espíritu del arte,  el cual no podía sentarse a esperar que artistas y críticos se pusieran de acuerdo en los parámetros que abarcarían las expresiones artísticas.  Finalmente,  el arte comenzó a fluir a través de los artistas,  sin tapujos ni recelos,  yendo cada vez más allá,  haciendo a un lado los convencionalismos académicos de las élites culturales.  El arte se convirtió en un campo de exploración para los artistas,  donde cada cual va haciendo su propio camino.  En un ámbito así,  los códigos establecidos para definir al arte como "bueno" o "malo" no tienen cabida,  pues el arte ya no radica en el mensaje o en la manipulación de un código preestablecido por una colectividad.  El arte radica ahora en la innovación del código,  en encontrar una forma de "inventar" un lenguaje nuevo, que a pesar de su novedad,  sea comprendido por la mayoría de las masas.  Esa es la esencia del arte contemporáneo,  y esa es su gran diferencia con cualquier obra de arte de fechas anteriores.

monumento original - Alfredo Palacio

Para explicar tales diferencias, tomemos el ejemplo de la escultura titulada "El Arrastre de Alfaro",  del escultor ecuatoriano Oscar Santillán.  Su obra se basa totalmente en una obra predecesora,  en el monumento a Alfaro que hiciera Alfredo Palacio(foto sobre estas líneas),  décadas atrás.  La obra de Santillán adopta como propios todos los elementos de la escultura de Palacio.  Para un crítico de arte del siglo XIX,  Santillán no tendría mérito alguno en su obra. Tranquilamente,  lo acusaría de plagio.  Pero,  para nosotros,  no se trata de una copia.  Al contar con la dramática alteración de reubicar la figura del General Alfaro dentro de la composición (foto bajo estas líneas),  el significado de la escultura como tal y el significado

maqueta EL ARRASTRE - Oscar Santillan

de los elementos dentro de la composición se vuelven totalmente diferentes.  En la obra de Palacio,  el General Alfaro comanda a la marea humana que lo acompaña, anhelante de alcanzar la igualdad de derechos y oportunidades que se lograron con la Revolución Liberal.  En la obra de Santillán,  el General Alfaro no comanda al pueblo.  Más bien, es arrastrado por una masa reaccionaria e irracional,  sin capitán ni cabeza. Dramática diferencia.  Dos esculturas, formas muy similares,  los mismos elementos de composición,  pero expresan mensajes distintos, de dos etapas diferentes de la historia ecuatoriana. 

5 comentarios:

Jaime Izurieta Varea dijo...

Qué interesante! pero me queda un par de dudas:
1. cuando el código, en su afán de transgredir y de individualizarse con una propuesta que sobrepasa los límites del respeto y es simplemente ofensivo, ¿sigue siendo arte?
2. cuando identificamos manifestaciones desechables que son arte popular, cada vez más ligeras y menos fundamentadas que antes, ¿estamos hablando de "arte" como una manifestación del estado de nuestra cultura y de nuestra sociedad? o son manifestaciones secundarias que no llegan al nivel del arte como lo conocemos, e incluso hasta podrian calificarse como artes menores. Tal vez es una visión demasiado clasicista la mía, pero comparar un vídeo de MTV con un Vermeer es un poco difícil, para comenzar por el hecho de que el vídeo mientras escribo esto ya pasó de moda, y el Vermeer ha estado ahí desde hace 400 años y probablemente seguirá ahí por muchos más.
Del mismo modo la arquitectura, antes estaba hecha para durar para siempre, y ahora no solo la manufactura y los materiales, sino también el diseño, el estilo o la funcionalidad son inmediatistas, como pidiendo ser desbancados por el siguiente estilo que arremeta con la misma lógica marxista de acabar con lo anterior para generar un nuevo orden.
Otro elemento que hace dudosa la arquitectura moderna es la excesiva figuratividad que les despoja de su calidad de edificios y les convierte más en esculturas.
3. Al momento de "inventar" (comillas tuyas) un nuevo lenguaje que sea comprendido por las masas, ¿será que bajamos el nivel de código, mensaje y medio, con el objeto de que sea entendido? Creo que es conveniente, más bien, propender mediante herramientas de persuasión y mediante la innovación en el uso de los medios, a subir el nivel de la audiencia, empujar los límites del entendimiento de la gente, de su curiosidad y de su interés por la búsqueda (o generar ese interés y esa curiosidad).

Autómata dijo...

Sr. dunn: será que desde su postura de arquitecto ud. tiene las cosas más claras, en unas pocas palabras le rescató y resaltó el valor de la obra de santillán. Eso es enseñar.

El arte contemporáneo creo que se reduce a simplemente ser "arte", y ojo no cualquier cosa es arte, pero si las expresiones humanas individuales (más allá de la estética)con esa carga emocional como ud. bien dice. Y creo que la percepción de lo que es o no arte también depende del "consumidor", definitivamente pocas cosas son universales, lo local y lo global se enfrenta, a mi parecer la máxima muestra de lo contemporáneo está en el arte callejero, en el stencil, en las intervenciones, en el "guerilla-art", son gráficos, obras figurativas, pero su relación con el entorno se vuelve conceptual, significativa, de peso... no olvide mencionarlo a sus alumnos...

saludos, lo seguiré con frecuencia acá en su blog

George dijo...

Yo discrepo con lo de que el arte contemporáneo sea entendido por la mayoría de la gente, por el contrario creo que es más difícil de entender; de ahí el recelo de las masas por este arte y consecuencia de esto el afán de permanentemente impulsar su difusión por parte de los "entendidos". Incluso yo siempre he pensado que el común de la gente guarda en su memoria a las artes clásicas con más gusto que al contemporáneo por esta dificultad de entender que menciono, y por eso también -capítulo aparte- gustan tanto de arquitectura con elementos historicistas, así lo veo yo.

PD. Ya abrí un nuevo blog, espero lo visite

Unknown dijo...

Respuestas a Jota.-

1.- Sí, mi amigo. El arte carece de ética y de moral. Ahora, muchos "artistoides" entienden mal esta concepción, y piensan qeu sus obras merecen ser catalogadas como arte, por el simple hecho de faltar a las normas establecidas. El arte puede romper los esquemas éticos de una sociedad, siempre y cuando que ello produzca una conmoción emocional o espiritual en el observador. Si no lo hace así, es un iconoclasta que busca llamar la atención.
2.- EL ciclo social a través fluye la aceptación de los objetos artísticos es complejo; y ahora lo es mucho más. Vermeer debe ser entendido como una obra de su época, no como una obra contemporánea a MTV, que es efímera en un 90% de su producción. Sin embargo, MTV produce algo así como un 10% de videos que serán para nosotros y para las siguientes generaciones un "hito" en las artes visuales. Al arte hay que entenderla siempre en su espacio y su tiempo. De lo contrario, van Gogh sería sólo un fulano que "hace lindos posters".
3.- Lo que sugieres en este punto es algo que le corresponde hacer al bun artista. Úno puede plantearse la posibilidad de mejorar el nivel de las clases "consumidoras de arte", pero no más que eso, y tal consigna no es misión del artista. Lo que el artista sí puede hacer, es ser más suspicaz en sus métodos de expresión.

Hablamos, pana!

Oscar Santillan dijo...

Tarde de domingo y me encuentro con esta grata sorpresa. Que interesante como inscribiste mi trabajo en tu explicacion de estas siempre conflictivas diferencias entre arte moderno - arte contemporaneo.
Te dejo la direccion de mi blog por si lo deseas chequear de rato en rato, www.oscarsantillan.blogspot.com

Saludos nuevos,
Oscar Santillan