cuantas veces me morí,
Y sin embargo sigo aquí,
resucitando.
"Gracias doy a la desgracia
y a la mano con puñal
que me mató tan mal,
...y seguí cantando."
"La Cigarra", de Mercedes Sosa. Pero recomiendo el cover rockero de Ariel Rot.
¡¡Wow!! ¡Siete meses sin abrir mi válvula de escape! ¡Bueh! Si antes me la pasaba embebido en mi deleitante arquitectura, luchando a quijotazos a los molinos del mal gusto constructivo nacional, ahora me he dedicado un poco más a otros quehaceres.
Estoy en varios proyectos de los que me siento afortunado de ser parte: estoy en una obra enorme, como es la remodelación del Termial Terrestre de mi "Guayami"; incentivado por una buena amiga, me metí en la empresa de tener un gato que es loco, inquieto y perezoso, egoísta, mañoso y mal llevado... Por eso ha de ser que nos llevamos bien el bicho ese y yo.
Supuse que estaría solo durante un largo tiempo, y aquel tiempo resultó más breve de lo que imaginé. En este camino recogí viejas amistades y sembré algunas nuevas. Muchas de esas amistades prevalecen; otras, tomaron su rumbo. ("nos tocaba crecer y crecimos. ¡vaya si crecimos!", dice Sabina). En todo caso, no me imaginaba el desenlace que han tenido los acontecimientos. Emparejado con quien amo, y a la espera de un hijo; conciente de las dificultades que vendrán mañana, pero entusiasta de poder enfrentarlas. La realidad todavía tiene esa maravillosa capacidad de sobre pasar nuestras espectativas, y patearle el culo a cualquier ficción que nos pasemos por la cabeza. ¡Qué bacán!
Sin embargo, esto ha sido una suerte de ciclo, porque al saberme futuro padre, tengo una tendencia casi compulsiva a escribir todas las tonteras que pienso (eso delata que por cada huachafada publicada en este blog, hubo como 10 que no publiqué). No sé por qué. Quizás mi hijo, al leer mis escritos no diga más que su padre es un anticuado, o cosa semejante que dicen todos los hijos en algún momento.
En todo caso, ha habido un retorno. No sé de quién, pues como dije antes, no soy el mismo de hace 7 meses. Quizás solo cargue más equipaje que antes, pero con esa diferencia ya no te sientes igual. No sé lo que salga ahora en este blog. Hay muchas cosas que tuve en el tintero que surgirán finalmente. Habrán otras que que hasta a mí me sorprenderán; no sé si por novedosas o por horripilantes. La única forma de saberlo es sentarse y escribir.
Es una gran alegría estar de vuelta.
¡Salud!
1 comentario:
Espero que sigas escribiendo, me encanta cómo escribes, podría leerte por horas. Además, el libro que me dio Amelia dice que es bueno para el bebé escribir todo lo que sentimos.Es maravilloso como en este corto tiempo nos cambió la vida de una manera tan linda, verdad? Te amo. Gracias por hacerme tan feliz.
Publicar un comentario